“Yo regalaba la invitación como parte del paquete. Lo interesante fue que un invitado me pidió cotización antes del evento porque le gustó mi oferta que apareció en el correo de confirmación. Me dijo que se notaba cuidado y profesionalismo. Lo cerré esa misma semana.”

“Aparecer en la confirmación fue lo que más me ayudó. La gente va con toda la atención puesta ahí. Una mamá me escribió preguntando si teníamos menú infantil… y ni siquiera había sido invitada directamente, se lo reenvió una amiga. Ahí entendí que el alcance va más allá del primer contacto.”

“Con una invitación digital me pasó que dos de las invitadas me escribieron antes del evento para agendar peinado y maquillaje. Una me dijo que le gustó los ejemplos que puse en fotos, y otra me vio en el correo de confirmación. Ahora pongo ‘agenda con anticipación’ como detalle y sí funciona.”

“Aparecimos en la confirmación de una boda con una promo tipo ‘Detalle inolvidable para los invitados’. Me contactaron dos personas antes del evento: una para comprar recuerdos, otra para una despedida. No lo creí hasta que vi el impacto real.”

“La primera vez puse mi logo sin esperar nada. Después de esa boda, tres personas me escribieron diciendo que ya habían visto mi nombre en la invitación. Uno incluso me dijo: ‘Sentí que ya te conocía’. No tuve que explicar nada.”

“Hicimos una campaña simple para aparecer en eventos de XV años. Una invitada vio nuestro anuncio en la confirmación y nos buscó para una boda que estaba organizando su hermana. Y ni siquiera era la festejada. Eso fue lo que más me sorprendió.”

“Nunca pensé anunciarme en una invitación, pero me funcionó mejor de lo que esperaba. Una madrina me escribió para su evento tres semanas antes de que fuera la boda donde aparecíamos. Me dijo que no sabía si hacíamos pasteles también para bautizos. Le dije que sí, y cerramos.”

“Cuando entrego una invitación con mi logo y mi WhatsApp, ya sé que me van a contactar al menos un par de veces. Y lo curioso es que ya no solo me buscan los novios, sino también los invitados. Varias personas me buscaron para su evento porque le gustó la oferta que mostré en el correo que recibieron.”

“Mi clienta era una mamá que hizo bautizo y luego pensaba hacer los 3 años. Cuando recibió la invitación, se la reenvió a su hermana. Al día siguiente, ya tenía a otra mamá escribiéndome porque le encantó el diseño… y mi salón siempre estuvo en cada parte del proceso.”

“En una invitación de boda colocamos un pequeño banner que decía ‘¿Tu evento también merece un brindis así?’ con un botón directo a WhatsApp. Me escribió un invitado una semana antes, y acabé sirviendo cocteles en un evento diferente. Sin redes, sin pauta.”

“Incluyo la invitación en mi paquete. No la vendo. Pero sí me ha traído clientes nuevos. Una vez, me escribió una amiga del novio. Dijo que no sabía que también ofrecía el servicio completo de sonido. Lo vio todo en la página de confirmación y me contrató para su boda.”